Puerto Madryn cerró el 2025 con un cambio significativo en la forma de tramitar las declaraciones de niñas, niños y adolescentes en casos de abuso sexual. El Ministerio Público Fiscal (MPF) consiguió reducir de manera sostenida los tiempos para concretar entrevistas en Cámara Gesell, un procedimiento clave para avanzar en este tipo de investigaciones.
El recorte en los plazos es resultado de un trabajo conjunto iniciado en marzo entre el MPF, el Colegio de Jueces Penales, la Defensa Pública, la Asesoría de Familia y la Oficina Judicial. La revisión de los pasos administrativos y la redistribución de tareas permitió detectar cuáles eran las etapas que generaban mayor retraso y cómo reorganizarlas sin afectar las instancias procesales obligatorias.
Un sistema que arrastraba demoras estructurales
Hasta el año pasado, el promedio provincial para concretar una Cámara Gesell rondaba los 170 días. La espera prolongada repercutía tanto en la calidad del testimonio como en el ritmo de las causas, especialmente en un tipo de delito que requiere intervenciones rápidas y coordinadas.
En Madryn, la secuencia tradicional de entrevistas previas, audiencias y autorizaciones judiciales solía resolverse con amplios intervalos. Para ordenar ese circuito, las instituciones acordaron avanzar hacia un esquema más continuo y con fechas fijadas de manera anticipada.
Cómo funciona el nuevo esquema
El dispositivo implementado desde el 1° de abril de 2025 establece que el MPF debe gestionar la entrevista preliminar con psicología forense dentro de los primeros tres días. La Oficina Judicial, por su parte, agenda la audiencia de apertura de investigación en un plazo máximo de dos semanas. Una vez que el juez autoriza la Cámara Gesell, la fecha queda definida en ese mismo acto, lo que evita reprogramaciones.
La aplicación de este modelo permitió articular los pasos en una secuencia más previsible y sin los vacíos temporales que antes extendían todo el proceso.
Datos del año: plazos más cortos y mayor enfoque en víctimas menores
Los registros muestran un impacto directo:
- El tiempo total entre la denuncia y la Cámara Gesell se redujo a 32 días, una baja superior al 80%.
- Se realizaron un 40% menos de entrevistas respecto a 2024, lo que permitió concentrar recursos en los casos prioritarios.
- El 90% de las declaraciones correspondieron a niñas, niños y adolescentes, frente al 75% del año previo.
Un cambio que repercute en las investigaciones
La disminución de los plazos tiene efectos concretos: evita segundas citaciones, reduce la exposición de las víctimas y facilita la obtención de relatos más completos. También aporta mayor previsibilidad al avance de las causas.
Desde la Fiscalía destacaron que esta reorganización “permitió un funcionamiento más dinámico y respetuoso de las necesidades de las víctimas, manteniendo intactas las garantías procesales”.
