La Cooperativa Servicoop alertó en las últimas horas sobre una serie de atascos y rebalses registrados en el sistema cloacal de Puerto Madryn, generados por el ingreso de elementos que no deberían ser arrojados a la red. Entre los casos más recientes, personal del área de saneamiento ambiental trabajó en varios puntos cercanos a la pista de atletismo debido a la presencia de botellas plásticas dentro de las cañerías.
Desde la cooperativa explicaron que el sistema cloacal está diseñado exclusivamente para transportar líquidos y desechos orgánicos. Sin embargo, con frecuencia se detectan trapos, cubiertos, ropa, juguetes, cepillos de dientes y otros objetos contundentes que quedan atrapados en la red y terminan provocando obstrucciones. Estas situaciones, además de generar daños en la infraestructura, representan un riesgo directo para la salud pública.
Puerto Madryn sostiene desde hace años una política de vertido cero al Golfo Nuevo, lo que implica que ningún efluente es descargado al mar. Para cumplir con ese objetivo, la ciudad cuenta con un sistema de recolección y transporte compuesto por siete estaciones elevadoras, más de 400 kilómetros de cañerías y 3.600 bocas de registro. Su correcto funcionamiento depende tanto del mantenimiento permanente como de la responsabilidad de los usuarios.
En ese sentido, Servicoop insistió en la importancia de no arrojar objetos indebidos al inodoro y recordó que manipular bocas de registro está terminantemente prohibido para personas ajenas a la cooperativa. Según informaron, en reiteradas ocasiones se detectaron vecinos utilizando las cámaras de inspección para descartar residuos, una práctica que agrava los problemas operativos y pone en riesgo la seguridad del sistema.
Finalmente, solicitaron a la comunidad que, en caso de observar a alguien manipulando bocas de registro, lo comuniquen de inmediato al teléfono 4453400.
